Cómo ayudar a nuestros alumnos TEA
Como es sabido, uno de los trastornos más frecuentes que nos solemos encontrar en nuestras aulas es el TEA(trastorno del espectro autista), lo que dificulta mucho a nuestros alumnos a la hora de seguir el currículum establecido pero que no se lo impide. Dentro de este trastorno podemos encontrar infinidad de variables y dependiendo del nivel de este podremos realizar determinadas acciones. Para diagnosticar este tipo de trastorno debe transcurrir bastantes meses hasta poder hacerlo y esto puede ser peligroso ya que cuanto antes se dé este diagnóstico antes se podrá empezar a trabajar con él .
Debemos tener en cuenta las diferencias que este tipo de niños puede tener con el resto debido a los problemas sensoriales que muestran, como molestias con el ruido o con señales luminosas que les hacen perder la concentración fácilmente. Para ello debemos tenerlo en cuenta y tratar de evitar estas situaciones para que nuestros alumnos TEA se sientan lo más cómodos posibles. Hay diferentes procedimientos que sirven para ayudar en su día a día como puede ser mantener unas rutinas diarias para que el niño conozca el plan diario o estructurar muy bien todas las tareas y actividades para que les resulte fácil de aprender y ejecutar.
Visto lo anterior, es importante hacer hincapié en la integración que tenga el niño dentro del grupo, algo que dependerá en gran medida del tutor pero también de sus compañeros y del centro al que acuda. Hay que tratar por todos los medios que el niño sea uno más del grupo y conseguir un alto grado de inclusión para que se pueda sentir cómodo y le resulte agradable ir al colegio, algo que en determinados contextos podría ser complicado. Será muy importante mantener una buena coordinación con la familia para que pueda llevarse a cabo un trabajo conjunto buscando siempre lo mejor para el niño y que encuentre estos mismos procedimientos en todos los ámbitos de su vida.
A continuación, vamos a ver el ejemplo de Gerard, un niño diagnosticado con este trastorno y que acude a la escuela ordinaria siendo capaz de seguir y trabajar como el resto de niños los contenidos del curso, lo que nos puede servir como referencia para saber actuar ante esta situación.
Para terminar , creo que es importante recordar que a estos niños tenemos que tratarlos como uno más, recompensando cuando consiga algún logro y avisándole cuando mantenga alguna conducta que no es la adecuada. Así, conseguiremos que el niño logre una inclusión total que, al fin y al cabo, debería ser nuestro objetivo principal ya que el resto llegará a partir de conseguir esto.
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